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DRENAJE LINFÁTICO MANUAL

 

La aplicación fundamental del drenaje linfático manual terapéutico está en el campo de la oncología para el tratamiento del linfedema, aunque también es tratamiento de elección en el caso de elefantiasis, celulitis, edemas traumáticos o complicaciones linfáticas posteriores a una cirugía estética.

 

Las maniobras manuales son muy suaves, se realizan a un ritmo lento y no producen dolor al paciente.

 

El objetivo principal es activar la circulación de la linfa, para que ésta no se estanque ni se sature de sustancias de desecho o gérmenes nocivos. Las maniobras específicas de DLM van dirigidas a favorecer el paso de la linfa hacia los ganglios linfáticos regionales superficiales.

Se facilita la función fisiológica natural propia del organismo del drenado y vaciado del edema y la movilización del tejido favoreciendo la evacuación de líquidos de las zonas afectadas.

 

 Hay varias contraindicaciones absolutas a tener en cuenta:

 

  •  Neoplasias en curso (cáncer)

  •  Infecciones agudas (heridas infectadas).

  •  Flebitis, trombosis o tromboflebitis en curso.

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